La industria aseguradora en México avanza hacia un modelo que vincula la cobertura financiera con la prevención en salud. Este nuevo enfoque busca incentivar hábitos de cuidado personal como estrategia para reducir riesgos y contener los costos médicos a largo plazo.
El plan incorpora herramientas de monitoreo digital, consultas preventivas y programas de bienestar que acompañan al asegurado durante todo el año. Además, fomenta la práctica de chequeos periódicos, actividad física y seguimiento nutricional, con el objetivo de disminuir la incidencia de enfermedades crónicas que representan una de las principales cargas del sistema de salud.
Seguro de salud con innovación preventiva
El seguro de salud diseñado bajo este esquema combina protección financiera con asesoría personalizada en temas de prevención. Asimismo, incluye beneficios adicionales como descuentos en farmacias, acceso a redes de médicos especialistas y plataformas tecnológicas para seguimiento en línea. En consecuencia, el modelo ofrece mayor valor agregado frente a pólizas tradicionales que se limitan a cubrir gastos médicos una vez ocurrida la enfermedad.
Por otro lado, las compañías que implementan este plan esperan fortalecer la relación con sus clientes, ya que promueven un rol más activo en la gestión de la salud. Del mismo modo, esta estrategia responde a la tendencia global de integrar seguros con soluciones de bienestar integral.
El anuncio difundido en septiembre de 2025 por actores del sector asegurador mexicano refleja un cambio estructural en la forma de diseñar productos.
Datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros indican que los gastos médicos mayores representan más del 45% de las primas totales del ramo salud, lo que justifica el giro hacia modelos de prevención.
