La industria aseguradora colombiana enfrenta un escenario en el que la inclusión financiera dejó de ser un ideal y se convirtió en un factor decisivo para la competitividad. La presidenta de Seguros Alfa, Sandra Solórzano, subraya que ampliar la cobertura requiere productos más simples, digitales y cercanos a poblaciones que antes permanecían al margen del sistema financiero.
El crecimiento del sector está directamente vinculado con la capacidad de responder a las nuevas dinámicas sociales y económicas del país. Además de la cobertura tradicional, la industria trabaja en soluciones que incorporen a trabajadores independientes, microempresarios y familias de bajos ingresos, quienes representan un segmento estratégico para el desarrollo sostenible del mercado asegurador.
Retos de la innovación en seguros
La innovación en seguros es un eje transversal que impulsa eficiencia y accesibilidad. En este punto, la digitalización de procesos y el uso de canales virtuales fortalecen la relación con clientes que demandan inmediatez y simplicidad. Asimismo, la regulación colombiana ha avanzado en normas que permiten ampliar el portafolio y garantizar mayor confianza, lo cual se traduce en una base más amplia de asegurados.
El sector también apuesta por alianzas con fintech y entidades financieras para generar sinergias que faciliten microseguros y coberturas adaptadas a necesidades específicas. De igual manera, el reto no solo radica en el diseño de productos, sino en educar al consumidor y generar cultura de prevención.
El mercado colombiano muestra signos positivos. De acuerdo con la Federación de Aseguradores Colombianos (Fasecolda), en agosto de 2025 las primas emitidas crecieron 11,3% anual, superando los 45 billones de pesos, reflejando el dinamismo de la industria y el interés creciente de la población por mecanismos de protección.
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